miércoles, 25 de febrero de 2015

¿Son importante los Valores Morales y los Valores Éticos en las organizaciones?


¿Son importante los Valores Morales y los Valores Éticos en las organizaciones?




  En general el tema de la visión, misión y valores que en las organizaciones es algo que se implementa de forma liviana y trivial en muchas de ellas, siendo solo declaraciones que vemos expuestas en cuadros instalados en lugares visibles de las empresas, pero que al preguntarle a las personas que ahí trabajan su significado, y como lo aplican en su cotidianeidad no saben qué y como responder.

 Los valores deben estar arraigados profundamente en las acciones y comportamientos que tiene las personan al interior de la organización así como en sus relaciones con el entorno, de no ser así son solo palabras y sabemos que a ellas se las lleva el viento.

Es un hecho que hoy en día las sociedades, no solo en Chile sino que ha nivel global, están siendo mucho más exigente con todas sus organizaciones e instituciones como por ejemplo; empresas, organizaciones políticas, poder judicial, etc. En este contexto establecer y declarar cuales son los valores que enmarcan nuestro actuar tanto a nivel personal como organizacional esta siendo cada vez más relevante.

Con el objeto de tener un marco de referencia común me gustaría compartir la siguiente una definición de valores; “Aunque suele hablarse indistintamente de valores morales y valores éticos en este caso efectuaremos una diferenciación entre los unos y los otros. Los valores éticos están constituidos por una serie de normas o pautas que regulan la conducta de los individuos, como la verdad, la justicia, la libertad y la responsabilidad. Mientras que los valores morales se refieren al conjunto de prácticas o costumbres comunes a una sociedad u organización, encaminadas a establecer una diferenciación entre la manera correcta o positiva de actuar, y la incorrecta o negativa.”

En este punto me gustaría hacerme cargo de la pregunta, ¿Por qué es importante establecer una declaración de los valores?.  Las respuestas pueden ser muy diversas, pero a mi juicio, una de las más relevantes es que “en cualquier organización humana los valores determinan el marco de acciones, comportamientos y respuestas que son posibles de observar, esperar y tolerar y por otra parte aquellas que no lo son”. Estableciéndose de esa forma un marco de certezas al interior de la organización, así como en la relación de ésta con su entorno, o sea en términos más coloquiales, se lo que puedo esperar y lo que no.

Por lo tanto, establecer, implementar y arraigar adecuadamente este tipo de declaraciones en las organizaciones permite que las personas en su interior establezcan relaciones de confianza que incentiven la creación de contextos donde el trabajo en equipo, la innovación y la creatividad pueden florecer facilitando el logro de los objetivos organizacionales.

Por otra parte, aquellas personas que no se sienten representadas por los valores declarados por la compañía, tenderán a dejar la empresa por cuanto les será muy difícil acostumbrarse a llevar a cabo todos los comportamientos, compromisos y conductas que éstos demandan. Es importante destacar, que lo recién señalado, no atenta contra la diversidad, amplitud de criterios y puntos de vista que toda organización requiere para ser exitosa.

En la actualidad en Chile estamos siendo testigos de cómo la ausencia de valores esta afectando a la sociedad en su conjunto (casos en los ámbitos empresarial y político) generando una falta de confianza y respeto por nuestras instituciones. Uno de los principales efectos negativos, a mi juicio, es que los niños y adolecentes aprenden copiando de los adultos y de no existir sanciones claras desde ámbito jurisdiccional y social ellos pueden llegar a pensar que esos comportamientos son aceptables y normales, con lo cual ellos muy probablemente los repetirán en el futuro.

Es importante rescatar valores que existían en el pasado, y se me viene a la memoria “el de la palabra empeñada“ que existía en el tiempo de mis abuelos (principios del siglo xx), recuerdo cuando él me decía que su palabra valía más que cualquier papel escrito. Su identidad, quien él era estaba integrada con respetar sus compromisos, no estaba sujeta a interpretaciones mañosas, juegos de palabras, etc.

 No es que crea que todo tiempo pasado fue mejor, pero si debemos rescatar cosas importantes alguna de las cuales, que a mi juicio, se han ido perdiendo.

Quiero terminar estas líneas remarcando lo importante que es para el éxito y la viabilidad de largo plazo que toda organización requiere, el definir y arraigar sus valores como las raíces de un árbol, o sea de forma profunda en la conciencias, los comportamientos y actitudes de todos sus colaboradores para asegurar el poder renovarse y adaptarse a los cambios que el entorno demanda de forma exitosa.



Autor: Javier Guinguis Ch.